¿Por qué duelen los testículos cuando nos excitamos y no hay... descarga?

¿Alguna vez has estado tonteando con una chica, con besos, caricias, roces, has estado excitado todo el rato y cuando os habéis despedido tenías un dolor en los testículos bastante intenso? ¿Alguna vez el chico con el que has estado te ha pedido que le ayudes a acabar porque sino se va a ir a casa con dolor de huevos?  Pues a esas preguntas vamos a responder hoy. Vamos a ver el porqué de ese dolor tan intenso cuando uno se excita y no eyacula. ¿Existe también en la mujer?

"Blue balls"

Traducido como bolas moradas, es el término inglés para referirse a este fenómeno del que vamos a hablar. La culpa de que esto nos ocurra es porque, al excitarnos, el sistema nervioso simpático incrementa el envío de sangre hacia los tejidos genitales, resultando en un incremento del flujo sanguíneo a través de las áreas de los testículos y próstata. Mientras esto ocurre, otros músculos que controlan la salida del flujo se contraen, provocando que entre más fluido del que sale (aumentando el tamaño testicular entre 25-50%) y asegurando una presión sanguínea en la zona lo suficientemente alta como para permitir una erección mantenida, y así posibilitar la penetración en el intercambio sexual.

Cuando esta excitación se mantiene de forma prolongada y sin llegar a la eyaculación, esa sangre, junto con líquido linfático, comienza a acumularse llegando un punto en el que el oxígeno comienza a faltarle, lo que se conoce como vaso congestión. Es esta vaso congestión en los testículos y la próstata la que provoca ese dolor tan típico.

Obviamente, la solución para evitar y/o eliminar este dolor interno es tan simple como "vaciar" esas pelotas moradas. Esa eyaculación va seguida de un nuevo estímulo nervioso que libera el flujo de sangre a través del área del pene y disipa la acumulación de fluido. Aún así, el dolor puede durar una hora en disiparse. Así que la mejor forma de no sufrirlo es no provocarlo, ya que el dolor llega poco a poco y nos avisa de que es mejor dejar de provocar o acabar con lo empezado.

Y en las mujeres... "Ovarios rosas"

También conocido como congestión pélvica o vaginal, puede considerarse como el homólogo femenino de las blue balls. Aunque en el caso de las mujeres, ese dolor suele estar relacionado con otros aspectos no relacionados con el sexo, como patologías ginecológicas (dismenorrea, endometriosis, adherencias pélvicas, enfermedad pélvica inflamatoria, síndrome de congestión pélvica, tumores ováricos o uterinos), gastrointestinales (síndrome de intestino irritable) y las urinarias.

Estos dolores que las mujeres sienten durante la penetración, y es una de las principales "excusas" para que las mujeres no quieran tener sexo.

Y aunque parezca un tópico o gracioso, la mayor parte de médicos te recomendará una de los siguientes remedios contra ambos genitales coloreados: alcanzar el clímax o ducha de agua fría. Puedes elegir el que más te apetezca, pero creo que sé cuál elegirás.

Y tú, ¿has sufrido alguna vez de bolas azules u ovarios rosas? Cuéntanos qué tal la experiencia.

 Fuente: sciencuriosities.blogspot

VÍDEO INTERESANTE

-----------------------------------------------------------------------------------------